Las aleaciones no ferrosas se utilizan extensivamente en la industria de los moldes de inyección de plásticos.
Estas aleaciones permiten a la industria de piezas plásticas cumplir las más elevadas exigencias de producción con ciclos cada vez más cortos.
Lo que caracteriza estas aleaciones es la combinación excepcional de resistencia, conductividad térmica y buen pulimento.
De esta forma, conseguimos obtener tiempos de ciclo más reducidos y piezas con mejor calidad.